EL CAMIONERO AMIGO DE MI MADRE - Relato Erotico Gay

Hola les cuento que tengo un cuerpo atlético, aunque no tan marcado, algo afeminado y con unas nalgas muy lindas. 
Creo que soy gay desde que tengo recuerdos...

La historia que les voy a contar comenzó un sábado en el que mi madre no estaba en la Montevideo y por un paro de ómnibus no podía regresar de la casa de mi abuela a unos 200 kilómetros. Y yo debía ir con ella.

Como a las 6 de la tarde mi madre me llamó y me dijo que había conseguido quien me llevara. Que un camionero amigo de ella andaba cerca y debía ir por trabajo hasta la zona de mi abuela. Me dijo que pasaría por mi a las 8 y que lleve ropa para quedarme.

Me bañé, me vestí, puse ropa en mi mochila y me senté a ver la tele.

Eran ya pasadas las 8 cuando escuché el timbre, era él. Vestía jeans, remera y zapatillas deportivas. Era un hombre atlético, bronceado, medio pelado y con una linda barbita, me dijo:

- hola. debés ser Alejandro, soy Bernardo el amigo de tu mamá, ya tenés tus cosas listas?

- si, apago la tele y nos vamos.

Salimos de mi casa y caminamos hasta el camión, me ayudó a subir y puso mi mochila en la parte de atrás de la cabina. En cuanto subí sentí ese aroma indescriptible a hombre...

Viajamos durante 30 minutos sin hablar mientras caía la noche, fue el quien inició la conversación preguntándome como me iba en la escuela, yo le contesté tímidamente al principio, pero luego entré en confianza y comenzamos a hablar de todo. Me contó que tenia 40 años, que estaba separado, que tenía una hija que casi no veía y que trabajaba de camionero desde los 20 años. 

En un momento me preguntó:
- Que hay de vos? las chicas, tenés novia o algo?
- no aún no
- y eres virgen ?
- si
- te hacés la paja muy seguido?
- mas o menos... Y que hay de vos? a mi edad tenías novia?
- si algo asi
- y eras virgen?
- no ya no
- tu novia tuvo sexo a esa edad?

- pues la verdad no, te cuento un secreto, cuando tenía tu edad tenía un amigito que era putito y me la mamaba cada ves que quería y hasta me lo cogía.

En ese momento su bulto comenzó a crecer y yo no podía evitar mirarlo.
- así?
- estaba lindo el guachito y sabía chuparla muy bien, mejor que muchas minas
- y te cogiste a mas putos en tu vida?
- bastantes... jeje, casi siempre jovencitos como vos...

En ese momento me miró y comenzó a sobarse el bulto por 
encima del pantalón. 

Yo solo lo miraba, pero el deseo me ganó y puse mi mano sobre su rodilla, el me miró con una pequeña sonrisa y dejó de sobarse y tomó mi mano llevándola lentamente hacia su bragueta y comenzé a masajeársela:

- sabía que eras putito, ya sabes mamarla?
- si, la verdad si
- y sos virgen?
- si
- y que estás esperando para mamarmela? me puse caliente.

Enseguida me agarró de la cabeza y me colocó frente a su bulto que había crecido y endurecido, le desprendí el pantalón y me asusté al ver su pija,
era muy grande y gruesa.

- ya conociste mis 25 cm, te gusta lo que ves?
- pues la verdad no
- te va a tener que gustar

En ese momento abrí la boca lo mas grande que pude y comencé a chuparla, él solo gemía de placer y me tomó la cabeza haciendo un mete-saca que me dejaba sin aire. Le decía que mas despacio y no me hacía caso, por momentos me daba miedo, ademas me daba nalgadas muy fuertes. Así se la chupé un buen rato mientras el manejaba. Hasta que paró a un costado de la ruta y comenzó a hacerme un mete y saca mas fuerte y me dijo que se venía.

Al instante se me llenó la boca de su semen muy caliente, fueron como 5 chorros abundantes, no pude tragarlo todo pero el me obligó a tragar todo lo que pudiera. Luego de eso me besó, se subió el pantalón y seguimos viaje mientras me decía que esa noche iba a perder mi  virginidad. 

A eso de las 9:30 estábamos a mas de mitad de camino, paró el camión tomo el celu y llamó a mi madre. Le dijo que se le había hecho tarde y estaba muy cansado, que dormiríamos unas horas en un paraje cercano y luego seguiríamos el viaje.  

Me dijo que iríamos a comer, fuimos a una estación de servicio y pidió una pizza, un pancho, cervesa y gaseosa. Comimos y mientras yo comía el pancho el me miraba y sin que nadie se de cuenta me decía cosas como que el pancho no era tan grande como su verga pero que me conformara por un rato con eso. 

Terminamos de comer y regresamos al camión que estaba parado junto a otros muchos camiones, me ayudó a subir, él subió enseguida, y se desprendió el pantalón saco su pija y comenzó a jugar con ella, luego me dijo que se la chupe y así lo hice el me tocaba la cola y me ordenó que me sacara el pantalón.

Luego me puso en cuatro patas sobre el asiento del lado y levantó un poco mi cola. 
Me chupó el culo, su lengua era muy larga y cada vez que la metía en mi culo apretado me hacía gemir de placer! Luego me metió un dedo. 

Entonces se acomodó y comenzó a frotar su pija en mi culo muy lento, luego un poco mas rapido y mas violento, en ese momento me asusté y le dije que pare que yo no quería hacerlo y que tenía miedo de que me lastimara.

El me tomó del cuello y me dijo:
- mirá putita ya llegamos hasta acá y te la vas a tener que aguantar y no me importa lo que pienses ahora, cuando termine vas a pedir mas como toda una golosa, así que calladita y no te preocupes que esta te va a entrar todita y vas a gozar como nunca.

Sin mas se puso un condón que sacó de la guantera, me tomó del pelo y metió su verga hasta mas de la mitad muy bruscamente, yo grite muy fuerte y comencé a llorar fue como si me partiera en dos, luego de eso empezó mas suave a meter lo que faltaba... yo solo le decía que pare.

Lo miré y el me miró:
- ahora si te voy a hacer gozar putito

Y me metió todo lo que faltaba, yo volví a gritar pero a él no le importó, esperó un ratito y luego comenzó a moverse muy lento. 

Yo gemía y lloraba muy fuerte, entonces me tapó la boca y aceleró las embestidas y ahí si que supe lo que era el dolor, realmente era muy doloroso, él solo gemía y sudaba mucho y me decía cosas sucias, luego me soltó y me ordenó sentarme sobre él, lo hice y el me agarró de la cintura y comenzó a meterla brutalmente, luego mas lento y luego lo hacía yo solo. 

Para ese momento ya solo lo disfrutaba y mucho...
No podía creer que aquel machote me estaba desvirgando, luego me acostó sobre el otro asiento, me abrió las piernas y comenzó a meterla mas fuerte que antes, yo gemía y le decía que me había convertido en su trola y que me gustaba como me metía y sacaba su divina y enorme pija. Eso lo calentaba mas, me agarró fuerte de la cintura y me dijo que se venía, sentí el fuerte chorro caliente que llenaba el condón en mi cola.

Luego la sacó, tiró el condón y me la paso por la cara, yo la agarré quería saborear aquella pija chorreando su semen caliente, la limpié bien con mi lengua mientas me acababa.

Después de limpiarnos me sentó sobre el y me dormi en su pecho peludo desnudo. 

Me despertó casi al amanecer me acompañó al baño, lavó bien mi colita que tenía un poco de sangre, me ayudó a vestir y seguimos el viaje. 

Cuando llegamos me enteré que Bernardo era su nuevo novio y que pronto se iría a vivir con nosotros...

Imaginen todas las cosas que hicimos viviendo juntos.

Hoy tengo 19 años, él ya no vive con mi madre, yo tampoco pero de vez en cuando lo visito...  

Enviado por Gabriel.

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